Estados Unidos se está "quedando atrás" de otras naciones importantes a medida que la esperanza de vida cae en picada

Aug 21, 2023

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Hubo un tiempo en que los estadounidenses disfrutaban de una esperanza de vida más larga que la gente de otros países.

Pero eso fue en la década de 1930, y una nueva investigación encuentra que desde la década de 1950, la esperanza de vida en los EE. UU. se ha quedado muy por debajo de la de muchos otros países.

De hecho, los ciudadanos de Albania, Líbano, la República Checa y Cuba ahora pueden esperar vivir vidas más largas y saludables que el estadounidense promedio.

"Puede que seamos uno de los países más ricos del mundo, y ciertamente gastamos más que todos los países en atención de la salud, pero los estadounidenses están más enfermos y mueren antes que las personas en docenas de países", dijo en un comunicado de prensa el autor del estudio, Steven Woolf.

"Incluso los estadounidenses con comportamientos saludables, por ejemplo, los que no son obesos o no fuman, parecen tener tasas de enfermedad más altas que sus pares en otros países", según la investigación, publicada en el American Journal of Public Health.

La caída de la esperanza de vida en los EE. UU. se ha documentado anteriormente, pero este nuevo estudio es excepcional porque no se limitó a las naciones desarrolladas ricas y porque amplió su alcance más allá de la década de 1980.

"Los expertos suelen considerar las décadas de 1980 o 1990 como el punto de inflexión cuando el crecimiento de la esperanza de vida en EE. UU. comenzó a tener un rendimiento inferior al de otros países", dijo Woolf, director emérito del Centro sobre Sociedad y Salud de la Virginia Commonwealth University.

Pero el nuevo análisis "muestra que las muertes prematuras entre los estadounidenses son un problema de salud pública mucho mayor y más antiguo de lo que se creía anteriormente", añadió.

A partir de 1950, los aumentos en la esperanza de vida en los EE. UU. que se observaron antes de la Segunda Guerra Mundial comenzaron a disminuir. La tendencia a la baja continuó y en 1968, según el estudio, Estados Unidos había caído al puesto 29.

Y a pesar de un breve aumento en la esperanza de vida de 1974 a 1982, la esperanza de vida comenzó a caer nuevamente en 1983, se estabilizó de 2010 a 2019 y se hundió durante los años de la pandemia de COVID-19.

La expectativa de vida promedio en los EE. UU. es ahora de poco menos de 77 años, una mejora de casi nueve años desde 1950.

Pero en comparación, un ciudadano japonés ahora puede esperar vivir casi 85 años.

Varios expertos han opinado sobre por qué la esperanza de vida en los Estados Unidos está cayendo en comparación con otras naciones.

Entre las causas se encuentran el abuso de drogas, los accidentes de tránsito, la falta de atención médica y la violencia armada.

"Está la epidemia de opiáceos, que claramente es nuestra... otros países no tenían eso porque esas drogas estaban más controladas", dijo a NPR Eileen Crimmins, profesora de gerontología en la Universidad del Sur de California.

"Parte de la diferencia proviene del hecho de que es más probable que conduzcamos más millas", lo que conduce a más accidentes fatales, agregó Crimmins, y señaló que "dos años de diferencia en la esperanza de vida probablemente se deba al hecho de que las armas de fuego están tan disponibles en los Estados Unidos."

El estudio encontró diferencias importantes entre los estados: la esperanza de vida era generalmente más alta en los estados del noreste y el oeste, pero más baja en los estados del centro sur y el medio oeste.

Sin embargo, existen excepciones notables.

Los datos publicados por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades mostraron que los residentes del estado de Nueva York tuvieron la mayor caída en la esperanza de vida de la nación en 2020.

La esperanza de vida de los neoyorquinos se redujo de una edad promedio de 80,7 en 2019 a 77,7 en 2020.

"Con el tiempo, hemos visto disparidades cada vez mayores en las tendencias de salud a nivel estatal", dijo Woolf, y agregó que aunque los estados pueden adoptar políticas que mejoren la salud, "muchos otros estados a los que les fue mal en este estudio ahora están debilitando o retrocediendo activamente dichas políticas.

"Seguiremos rezagados a menos que tomemos en serio las soluciones políticas", continuó Woolf.

"Cuando estábamos haciendo [el estudio], bromeábamos que deberíamos llamarlo 'Live Free and Die'", dijo Crimmins, refiriéndose al lema del estado de New Hampshire, "Live Free or Die".

Pero le dijeron: "Eso es escandaloso, es demasiado provocativo".