Desarrollando un automóvil adaptativo
Mar 07, 2023Validación de métodos analíticos para la determinación de ensayo de cannabidiol y tetrahidrocannabinol en productos infundidos con aceite de cáñamo por RP
Mar 09, 2023El tamaño del mercado de la cromatografía aumentará en USD 3785 830 000 000; América del Norte representará el 45 % del crecimiento del mercado
Mar 11, 2023Cromatografía de par de iones
Mar 13, 2023Extracción de un combustible limpio del agua
Mar 15, 2023Los lantánidos enlazados arrojan luz sobre el campo de la ingeniería de cristales
Los científicos conectaron dos cristales blandos y observaron la transferencia de energía entre ellos, un hallazgo que podría conducir al desarrollo de materiales sofisticados y receptivos. El estudio, realizado por científicos de la Universidad de Hokkaido en Japón, fuepublicado en la revistaComunicaciones de la naturaleza.
Los cristales blandos son sólidos moleculares flexibles con estructuras altamente ordenadas. Cuando se les somete a estímulos externos, como el vapor o el roce, sus estructuras moleculares se reordenan y responden cambiando de forma, color o luminiscencia.
"Queríamos saber qué sucedería si fusionáramos cristales blandos a nivel molecular para conectarlos", dice Yasuchika Hasegawa, químico de materiales de la Universidad de Hokkaido y autor principal del estudio. Hasegawa y su equipo utilizaron metales de tierras raras llamados lantánidos, cuyos iones tienen radios igualmente grandes y, por lo tanto, forman estructuras similares. Los compuestos de lantánidos, de los cuales hay 15, son interesantes porque pueden ser luminiscentes.
El equipo estudió las estructuras de los cristales hechos de los lantánidos terbio (Tb), que se ilumina en verde, y disprosio (Dy), que se ilumina en amarillo. El equipo primero vinculó los cristales de cada lantánido por separado y observó las estructuras y la transferencia de energía dentro de los compuestos. Luego usaron esta información para fusionar los cristales de Tb (III) y Dy (III) a través de un enlace de piridina y examinaron la estructura molecular de una transferencia de energía dentro del "tren molecular" fusionado.
Cuando excitaron el extremo de disprosio del tren con luz azul, observaron una luminiscencia verde en el extremo opuesto de terbio. Sus cálculos revelaron que la energía se transfirió de un cristal a otro en una distancia de 150 micrómetros. "Esta distancia de migración de energía es la más larga reportada para polímeros de coordinación de lantánidos o sistemas complejos", dice Hasegawa. El extremo de terbio continuó luminiscente durante 0,60 milisegundos.
La conexión de cristales blandos podría conducir a la formación de nuevas estructuras cristalinas que podrían tener aplicaciones en semiconductores, láseres, fibras ópticas e impresión.
- Este comunicado de prensa se publicó originalmente en el sitio web de la Universidad de Hokkaido
publicado en la revista